Siento que se me han agotado
las fuerzas
para seguir,
que he dado tanto por ti
que no queda
nada de mí.
Aprendí a estar sin ti
y a quién quieres
dejar ir .
Pero tuviste que volver
y volver a prometer
que te quedarías aquí.
Quién te
has creído que eres
para destrozarme de nuevo,
para obligarme a empezar
una vez más de cero
Ahora te tengo que dejar marchar
y volver a asimilar
que ya no vas a estar.
Sólo me queda pedirte;